Hola nuevamente por aquí con una nueva publicación que creo que puede ser muy interesante para muchas personas adultas que como yo, estoy casi seguro que padezco de este problema, pues reúno casi el 70% de los síntomas, sin embargo es algo que puede tratarse, yo estoy en proceso de ver como puedo diagnosticarme y ser tratado para corregir algunos de los problemas que actualmente tengo, les dejo entonces el siguiente reportaje tomado del Laboratorio Janssen-Cilag Neurociencias.
El TDAH es una condición que puede afectar a niños, adolescentes y adultos.
Muchos adultos padecen el Trastorno por déficit de atención con hiperactividad del adulto (TDAH del adulto) y no se dan cuenta. ¿Por qué? Porque muchas veces sus síntomas se confunden con los de vivir con estrés.
La comprensión de que el TDAH con frecuencia perdura hasta la edad adulta se ha dado en las últimas décadas. La creencia que prevaleció entre los profesionales durante muchos años era que los niños y adolescentes podían superar los síntomas del TDAH en la pubertad y con certeza en la adultez. Sin embargo, investigaciones contemporáneas, nos muestran que cerca del 30 al 70% de los niños diagnosticados con TDAH continúan presentando los síntomas del trastorno en su vida adulta, que interfieren significativamente con su vida académica, vocacional o social.
El TDAH ha sido reconocido y tratado en niños por casi un siglo, pero el TDAH en adultos es visto como un “trastorno escondido”, porque los síntomas del TDAH se ocultan con frecuencia detrás de problemas en las relaciones interpersonales, laborales y académicas.
Algunos adultos con TDAH tienen también problemas de depresión, ansiedad, abuso de sustancias e impulsividad, lo que provoca dificultad en su vida y relaciones cotidianas. Si usted ha tenido este tipo de situaciones en varias ocasiones, quizá padezca TDAH del adulto, una enfermedad que su médico puede diagnosticar y tratar.
Los síntomas del TDAH en el adulto son:
- No lograr mantener la atención a detalles o cometer errores por descuido en el trabajo.
- Realizar movimientos nerviosos con manos o pies, retorcerse en el asiento.
- Tener dificultad para mantener la atención en tareas o actividades de diversión.
- Pararse en situaciones en las que se espera permanezca sentado.
- No escucha cuando le hablan directamente.
- Sentirse intranquilo e inquieto.
- No seguir instrucciones y no terminar el trabajo exitosamente.
- Dificultad para organizar tareas y actividades.
- Dificultad para involucrarse en actividades calmadas en sus ratos de ocio.
- Sentirse “en marcha” o “empujado por un motor”.
- Evita y le disgustan los trabajos que requieren un esfuerzo mental sostenido.
- Hablar excesivamente.
- Perder cosas necesarias para tareas y actividades.
- Contestar abruptamente antes de que terminen de preguntarte algo.
- Se distrae con facilidad.
- Tiene dificultad para esperar su turno (impaciente).
- Olvida sus deberes diarios.
- Interrumpir o entrometerse en lo que otros están haciendo.
A pesar de que se ha incrementado la conciencia y la identificación den trastorno en adultos, muchos permanecen sin diagnostico y sin tratamiento. Los síntomas del TDAH son comunes a otras condiciones medicas y psiquiátricas y algunos factores de estrés situacionales o de medio ambiente, por lo que los adultos no deben auto diagnosticarse, si no buscar un diagnóstico de profesionales calificados y con experiencia.